TIPOS
* Microsporum canis (responsable de la mayoría de las micosis en gatos y del 80% de los perros.)
* Microsporum gypseum (en muy pocos casos)
* Trichophyton mentagrophytes ( 15% de los casos)
* Candida albicans
* Malassezia pachydermatis
Afecta con mayor frecuencia a animales jóvenes debido a que tienen menor inmunidad Y Se presenta con más frecuencia en climas cálidos y húmedos. Lo mismo sucede con los niños, por consiguiente los jóvenes menores de 15 años y los adultos con las defensas inmunitarias bajas son propensos a contagiarse hongos del perro o del gato.
SIGNOS EN EL CUERPO
La lesión característica y mas frecuente en el perro y en el gato de una micosis por tiña es una zona de la piel en forma de medallón, donde se ha caído el pelo, en general en la región de la cabeza y extremidades y que no pica. Raramente encontramos costras salvo que tengamos una infección bacteriana secundario, cuya lesión le llamamos querion .
Cieguita (Refugio Villaguay)
"Mili" Curaciones con Iodopovidona (Refugio Villaguay)
En las personas causa una lesión roja redonda con centro claro que pica mucho. Puede ser de diferentes tamaños y aparecer en cualquier lugar del cuerpo, sobretodo en las partes más expuestas al contacto con los animales, por ejemplo: antebrazos y piernas.
TRATAMIENTO
El tratamiento de un cachorro, si la lesiones son pocas y pequeñas, es local con tópicos (cremas o soluciones específicas) y baños.
Si las lesiones son extensas el tratamiento se basa en antimicóticos como la Griseofulvina u otros como el Ketokonazol, fluconazol, etc.
La dosis diaria se divide en dos tomas. El tratamiento tentativo se hace no menos de 4 semanas hasta 8 semanas. También se pueden utilizar Shampúes con iodopovidona o clorhexidina o Solución de tiabendazol al 13%.
En general los antimicóticos tienen varios efectos secundarios indeseables muchos son hepatotóxicos o pueden dar anorexia, vómitos y diarrea, por éstas razones es fundamental que los medicamentos indicados sean recetados por su Médico Veterinario.
Resumiendo: Los hongos aparecen en el animal cuando éste se encuentra con las defensas bajas que permite el desarrollo del parásito, y el cual siempre está presente ya sea en el suelo o en otro animal sano pero que es portador sin que manifieste la enfermedad, o sea que un cachorro siempre corre el riesgo de contagiarse "hongos" y luego contagiarlo a los niños, por consiguiente hay que tratar que el cachorro tenga las defensas inmunológicas altas y desarrolladas lo más posible de acuerdo a su edad para que sea resistente a la dermatomicosis y eso se logra llevando un plan sanitario adecuado, como por ejemplo las vacunas al día, bien desparasitado y bien alimentado, evitando de esta manera, la manifestación de esta enfermedad y otras patologías asociadas a las bajas defensas inmunológicas.