Pirotecnia y sedantes para mascotas

En esta época que se avecina, donde los cohetes y las bombas de estruendo son moneda corriente, muchos dueños deciden sedar a sus mascotas para mantenerlas calmadas durante los estruendos y así evitar que huyan asustados hacia cualquier lugar.
Dichos sedantes deben ser administrados y recetados exclusivamente por médicos veterinarios ya que son drogas que afectan el sistema nervioso del animal y su dosificación depende de su kilaje.


La marca más ampliamente reconocida es ACEDAN. Es una solución a base de Acepromacina, un tranquilizante neuroléptico y viene en varias presentaciones (gotas - pastillas - inyecciones)
Este tipo de sedantes disminuye la excitabilidad nerviosa sin embotamiento de la consciencia ni tendencia al sueño, produciendo un estado de quietud y calma en los animales excitados o no, indiferencia al medio con disminución de la actividad motora. Produce sedación, aletargamiento, somnolencia, baja el umbral convulsivo y disminuye la respuesta motora frente a estímulos sensitivos (auditivos, visuales) de mayor intensidad.

 

Como actúan sobre el Sistema Nervioso Central provocan hipotermia (el animal tiene frío), baja la presión arterial y disminuye el ritmo respiratorio.

Está indicado para situaciones como:

  • Premedicación anestésica
  • Facilitador del manejo del animal en maniobras clínico-quirúrgicas y diagnósticas
  • Anticenetósico (para evitar mareos en viajes)
  • Cualquier caso donde se necesite poner al animal indiferente a estímulos excitantes en su entorno, como es el caso de la pirotecnia.

La cantidad de gotas que se le debe dar al animal depende de cuantos kilos pese, del mismo modo que no es lo mismo sedar a un perro que a un gato. Por esa razón, se debe acudir siempre al veterinario para que el profesional sea quien indique la dósis correcta.
Por otro lado, existen razas más sensibles como los Bóxers, perros braquiocefálicos (cara plana y hocico corto) o considerados "gigantes" donde se recomienda reducir la dósis al 50% y cambiar la vía de administración de gotas a inyecciones intramusculares.
Su uso está restringido en animales hipovolémicos (que hayan tenido una hemorragia), deshidratados, anémicos,  convulsivos (con epilepsia), perras o gatas preñadas, cachorros, con trastornos hepáticos o de corazón y con alergia a la medicación.


Si la medicación es mal suministrada, que es lo que sucede cuando los dueños medican sin consultar a un profesional, el animal corre riesgo de sufrir una sobredósis, en cuyos casos ocurre hipotensión severa, arritmia grave, colapso respiratorio, paro cardíaco y potencialmente, la muerte. 

Seamos responsables con nuestros mejores amigos. Nuestra intención al querer que no sufran de los estruendos es buena, pero tengamos en cuenta que hablamos de drogas y que en general no conocemos su anatomía ni su fisiología. Llevalo a tu veterinaria de confianza y así las fiestas serán felices para todos.

1 comentarios:

Trucha dijo...

Pobrecitos, mis perritos lloraron mucho en año nuevo.

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